El primer sábado de octubre se celebra el Día Nacional del Mutualismo, instituido oficialmente por el decreto 22.946 del 25 de septiembre de 1945, aunque el mutualismo argentino ya venía celebrando la existencia y las actividades solidarias de este movimiento desde mucho antes, según referencias encontradas en antiguos documentos.
El decreto fundamenta la fecha, considerando que «el mutualismo constituye en el país, actualmente, un esfuerzo ponderable de agremiación, alcanzando una magnitud y un relieve insospechado; que el desarrollo de la acción privada de dichas instituciones redunda en beneficio de la masa obrera del país, evitando en sí el pauperismo; que el punto de partida de los sistemas de seguro social lo construyeron las organizaciones mutualistas sobre los mismos principios fundamentales que dieron vida a éstas; que todo lo que el Estado haga por intermedio de sus organismos oficiales para difundir y estimular el mutualismo, significará un movimiento de profundo contenido social».
Según la definición más repetida, el mutualismo es un sistema de carácter social que se creó para ocuparse del bienestar material y espiritual de las personas y demostró ser una de las formas asociativas más eficaces para cumplir ese cometido.
En consecuencia, las mutuales son asociaciones y no sociedades, ya que no persiguen la obtención de lucro, sino prestar un servicio, desarrollando en forma permanente actos de interés social. Son entidades abiertas, integradas por personas que libre y democráticamente se unen para un fin común.
Compartimos el mensaje a las mutuales del presidente del Directorio del INAES, Marcelo Collomb, en ocasión de un nuevo Día Nacional del Mutualismo.